«He pactado cuatro años con Vox y no ha pasado nada». Quien así se expresaba recientemente ante el temor de la entrada en tromba de la derecha en las instituciones era Isabel Díaz Ayuso. También conocida como Madame la Présidente, Días de Ayuno, la pupila dilatada o doña Rogelia. No pasa nada, chicos. No hay nada que temer. ¡Que no se acaba el mundo! No se acaba, tranquilos.

Es que sois unos exagerados, de verdad. ¿Qué creéis, que va a venir Vox con un lanzallamas a quemaros? Como mucho, no sé, les quitará algunos derechos a colectivos de esos que vienen a romper España. Que la necesitamos unida, grande y libre.

Bueno, a lo mejor también retira ayudas a espacios de igualdad y quita las concejalías destinadas a promover políticas contra la violencia de género. Pero el PP se ocupa. Aunque no se nombre, existe. Ah, que no. Hombre, no me seáis cenizos. Ya veréis como Feijóo cumple su palabra: que no se refleje «violencia machista» en ninguno de los acuerdos es simplemente una casualidad. Qué más dará llamarla intrafamiliar que machista. Qué más dará ETA que movimiento vasco de liberación. Y qué manía con que todo quede por escrito. Los hombres de bien cierran sus negocios con un apretón de manos.

Hay que dejar de decir esas cosas. Y hay que dejar de ir a concentraciones en las plazas de los ayuntamientos cuando se asesine a una mujer. Como en Nàquera. Allí saben que las mujeres somos unas quejicas. Seguramente, porque no tenemos pene. Es que no tener pene nos convierte en locas, en petardas, en charos. Se nos olvida que nos buscamos lo que nos pasa. Mira el pobre Carlos ‘Divorcio duro’ Flores, futuro diputado por Valencia en el Congreso. Su mujer venga a provocar para que él la persiguiera en moto, hasta el colegio o se plantara debajo de su balcón durante meses a comentarle algún que otro desacuerdo. Algo habría hecho, seguro. Uno no se pone así porque sí.

Además, Carlos ha hecho algo mucho más importante: evitar que su exmujer quiera liarse con otro. Que mira tú que si se enrolla, qué te digo, con un negro, o con un moro, para continuar con el gran reemplazo, llenarlo todo de menas y… Ah, que los menas son los negritos que no tienen a los papás aquí. Bueno, ya me entendéis. Me refiero a los chiquillos esos que viven hacinados en un centro de acogida pero que luego salen con dos o tres mil euros al mes en el bolsillo y roban en los supermercados. Esos. ¿Que por qué roban si tienen dos o tres mil euros de paguita? Ay, mira, yo no lo sé todo, ¿vale?

No pasa nada, joder. Os ponéis hechos un basilisco por la entrada de Vox en las autonomías. ¿Que quieren la concejalía de Cultura? ¿Acaso hay alguna diferencia entre la cultura que promueven las izquierdas y la de ellos? Yo no la veo, vamos. Vale, sí, que a lo mejor piden que se retire algún cartel LGTBI. Ok. O les ofende que se utilicen imágenes que ellos consideran sagradas. Pero es que si las mujeres van provocando, los maricones, ni te cuento. ¡Ideología, todo es ideología! No como la España de siempre, que reza y se le olvidan todos los males porque dejan de existir. Dios es todopoderoso, no lo olvidéis nunca. El nuestro, claro, que es el único verdadero.

No buscan la igualdad de derechos, ni unos ni otros. Lo que quieren es que los reguemos de dinero público. Y el dinero público es sagrado, como los santos y las vírgenes. ¡Fuera todos los chiringuitos ya de una vez! Quieren que nuestros hijos, católicos devotos, se corrompan fuera de las iglesias, fuera de la protección de nuestros sacerdotes. El dinero público no se toca. Ya lo toca Vox. Pero con criterio.

¿Que no tienen programa político? ¿Que en todas partes, en las municipales, usaron el mismo programa y proponían limpiar las playas de Tarancón, por ejemplo? Minucias. Os fijáis en unas tonterías… Lo hicieron porque todos sabemos que hay que reunificar España, que estaba rota, y os iban poniendo en sintonía. Pero como no entendéis nada, que hay que explicároslo todo…

No pasa nada. Es como cuando vas a follar por primera vez, estás muerta de miedo y tu novio te dice eso, que no pasa nada. Un empujoncito, un poco de dolor, un poco de sangre y ya, chica, que te quejas de vicio. Con lo que te gusta en el fondo, que se te nota por cómo le miras, que un poquito puta has sido siempre, ¿eh? Menos mal que él te quiere de verdad y no te lo tiene en cuenta, y te protege de todos los peligros que acechan ahí fuera. Por eso no debes salir con tus amigas, y mucho menos con esa que tiene pinta de bollera, que cualquier día te contagia el vicio. Sal solo con él, coño. Si es por tu bien.

En serio, tenemos que concienciarnos de que no pasa nada. Todo va a seguir igual. ¿Que tu novio te preña sin querer? Los dieciocho son una edad estupenda para embarazarse. Estás lozana, así puedes repoblar el país. Ya estudiará él por los dos. ¿No tienes claro si quieres tenerlo? Ven, ven a escuchar el latido fetal. Es por aquí, por este pasillo. No, por ese no, que ahí es donde te inyectan grafeno y microchips. Vacunas caca. Tú ven conmigo, yo te llevo.

De verdad, no pasa nada. Qué más dará Vox que cualquier otro partido. Lo sabéis, lo sé yo y sobre todo lo sabe Feijóo, que ha puesto en marcha lo que yo he dado en llamar programa político cuántico, por el cual con un 12% de votos Vox tiene derecho a vicepresidir, quedarse con dos o tres concejalías especialmente sensibles y dos huevos duros y con un 8% pues no. ¿No os vale la explicación para entender los pactos? Pues queda bastante clarito, yo no sé qué es lo que no entendéis.

Cómo que son populistas. Eso lo sabremos cuando gobiernen, que Feijóo ha dicho que todavía no gobiernan y no sabemos si lo son o no. Son los populistas de Schrödinger, unos pican y otros no. Ay, que me lío. Eso, que no gobiernan. No, hombre, lo de Castilla y León no cuenta. ¿Que os lo explique? ¡Mira, Venezuela! ¡Por ahí va el Falcon volando! ¡ETA, ETA, Venezuela, Falcon, paguitas, ETA!

Madre mía, las horas que son y todo el rojerío haciendo el vago. Menos mal que en un mesecito volvemos todos al redil. Me voy ya, que no recuerdo dónde dejé la mantilla del Corpus Christi y ya mismo es domingo. Feliz fin de semana, si Dios quiere, y viva el rey de España.